El mundo ha cambiado de una manera radical, en la actualidad vivimos en una era digital donde la tecnología juega un papel muy importante en nuestras vidas, esto ha transformado el mundo de la comunicación en uno globalizado a nivel tecnológico, social y cultural ya que todas las personas estamos interconectadas entre sí por dispositivos digitales tales como smartphones, tablets, Pcs, etc…

En 2014, Internet fue el segundo medio por volumen de inversión publicitaria con 956,5 millones de euros, gran parte de estas inversiones es debido a que cerca de 3.000 millones de internautas acceden a todo tipo de plataformas web y redes sociales, en consecuencia de ello las empresas ven una nueva alternativa para posicionarse en los mercados digitales nacionales o internacionales con más facilidad, eliminado costes y llegando a su nueva cartera de clientes en un menor tiempo.

Con el paso de los años las empresas que deciden desarrollar un comercio digital deben tener una visión diferente a la tradicional ya que tienen que centrar sus esfuerzos en transformar los «me gusta» de sus seguidores en ventas ya que el internauta en muchas ocasiones puede aportar sus experiencias de compras sociales y colaborativas, (social commerce) en redes sociales como: Facebook, Twitter e instragram, por ello es importante optimizarlas para monetizarlas, ya que en el marketing digital el contenido de las páginas web, blogs, redes sociales tienen que ser la base de nuestra estrategia de marca.

Además estas tienen que adaptarse a los multiformatos de los dispositivos digitales que poseen los consumidores potenciales para poder llegar a todos los consumidores potenciales, por ello el Responsive Design es clave en el E-commerce ya que por ejemplo; un diseño de página web puede adaptarse perfectamente a todo tipo de pantallas y resoluciones lo que reduce costes y evita redirecciones o duplicidad de páginas web.

Así pues, el marketing tradicional da un paso al marketing digital y a su vez, la publicidad impresa pasa a ser display, el marketing directo a permission marketing, las páginas amarillas a los buscadores digitales, las relaciones públicas a las redes sociales y el cliente potencial a la audiencia objetivo.

Para finalizar, es imprescindible conocer los costes del marketing digital que el empresario tiene que soportar para realizar un eficaz plan de marketing online:

CPM (Coste por Mil Impresiones): Representa el coste por aparecer impreso en la pagina web donde se publicita.
CPC (Coste Por click o visita): Precio pagado por que un usuario haga click o visite tu página web.
CPL (Coste Por Lead): Precio pagado por que un internauta contacte con el empresario.
CPA (Coste Por Adquisión): coste que paga la empresa sólo cuando un usuario hace click y compra un producto.
CPE (Costo por Engagement): coste que cuesta conseguir un «like»o un seguido.

Estas son algunas herramientas para guiar a negocios online existentes a su máximo apogeo o ayudar a conocer a nuevos empresarios  a tener  una nueva visión comercial  para generar fondos a través de Internet.